El periodista Cecilio Flematti entrevistó a la cantante para el segmento A dos metros de la verdad.

Cecilio Flematti creó el proyecto A dos metros de la verdad en donde junto a GENTE y a través de este segmento, el periodista busca dialogar con diferentes artistas sobre temas trascendentales que nos impactan a todos en el día a día

Si bien hay un momento de reflexión profesional, el segmento no apunta a que los artistas hablen sobre su trabajo, sino más bien que den su mirada crítica como ciudadanos, desarrollando temas de actualidad como el coronavirus, la política o el feminismo.

En esta oportunidad se sometió a las preguntas la cantante, compositora, psicóloga, productora y DJ argentina María Paz Ferreyra conocida como Miss Bolivia.

Ella, con su música fusiona estilos como la cumbia, hip hop, dance, cumbia villera, reggae y lleva como bandera en sus canciones los mensajes de protesta. Se caracteriza por su militancia en el feminismo y la lucha de los derechos de la mujer. En ese contexto, Cecilio le consultó cómo veía al movimiento hoy en día y respondió:

“Se avanzó en la visibilidad, pero las mujeres siguen muriendo”, sostuvo y agregó: “Hay feminismos radicales y extremos. El feminismo extremo no me convoca, también creo que hay grietas dentro del feminismo y que no debe excluir a las colectividades trans”.

Para la sección PING PONG, de la entrevista, Cecilio nombra a diferentes figuras del rubro político o de otros ámbitos y los invitados deben responder con una palabra. María Paz respondió “vacío” sobre Dios, “Mauricio” para Macri, a Cristina la catalogó como “Presidenta”, para Alberto Fernández dijo “Presidente” y sobre Argentina lanzó un “complicada”.

Con respecto al mundo de la política Miss Bolivia confirmó que “le ofrecieron participar en la política” pero que dijo que no porque “no podría soportar la caca” que hay en el ambiente. Además, sostuvo que “con Macri estaríamos peor” en relación a la pandemia y las decisiones políticas y lanzó un voto de confianza con el Gobierno Nacional: “se le cayó un piano en la cabeza”.