La enorme sonrisa en su cara esconde un pasado triste. Esta pequeña perra nació y creció en las calles de Fresno, California. Sus primeros años fueron difíciles y su salud empeoró rápidamente, pero pudo recuperarse.
Es entonces cuando fue trasladada a un refugio. Llena de amor, conoció a miles de familias, pero ninguna decidió adoptarla debido a los distintos estereotipos que hay en torno a la raza Pitbull y su denominada “peligrosidad”.
Sin embargo, cuando todo parecía perdido, una mujer vio un video de la cachorra y fue amor a primera vista. Se flecharon mutuamente.
De esta manera, Pastelito fue adoptada y ahora enamora a todos con su sonrisa sobre todo en las redes sociales.