En febrero, Paulo Londra fue padre por segunda vez en medio de una batalla judicial con su ex pareja, Rocío Moreno, con quien dejó de frecuentarse en la primera parte del embarazo de ella. Con la necesidad de firmar un documento legal donde el artista se comprometa a sus obligaciones, tuvieron que llegar a la justicia.

Porque si bien Paulo se hizo presente en la clínica cordobesa donde Roció dio a luz a Francesca, hoy de dos meses de vida, no se venía ocupando de la nueva gestación como tampoco de Isabella, su otra nena de dos años. Pero a partir de ahora deberá hacerlo en base a lo dictaminado por la ley.

Londra deberá abonar todos los impuestos relacionados a ese "techo" donde vivan las peques y darle a Moreno un auto a disposición para que pueda trasladase de un lado al otro todas las veces que quiera o que considere necesario. Además, deberá cubrir el gasto de la Obra Social de las menores y la de Rocío.

Y Paulo pagará los gastos que conllevan el mantenimiento del banco de Células Madres, el colegio al que asistan las chicas y todo tipo de actividades extras que realicen a lo largo del tiempo. Claro, lo que para muchos puede considerarse un abultado arreglo, hay que tener en cuenta que es acorde a los importantes ingresos que tiene el rapero por su carrera que está en etapa de resurgimiento.