Con solo 24 años, Manuela Martínez —más conocida como Manu Martínez— ya se posiciona como una de las voces emergentes del indie argentino. Hija del histórico líder de Los Piojos y actual frontman de Ciro y Los Persas, Andrés Ciro Martínez, Manu lleva la música en la sangre. Pero lejos de quedarse a la sombra de su apellido, ha sabido abrirse paso con una identidad propia, sensibilidad artística y un estilo que mezcla lo íntimo con lo generacional.
Nacida en Buenos Aires en 1999, es fruto de la relación entre Ciro y Carolina de la Presa, y hermana menor de Katja Martínez. Su vínculo con la música comenzó desde muy chica, impulsada tanto por su madre —quien fue la primera en ponerle una guitarra en las manos— como por el ejemplo constante de su padre, a quien acompañó en varias giras y recitales.
Ese aprendizaje temprano desembocó en un debut impactante: a los 15 años, se subió al escenario del Cosquín Rock en la misma fecha en que tocaba su papá, para interpretar ante miles de personas su propia canción, “Fotos del ayer”. La experiencia no solo la marcó, sino que fue la semilla de lo que sería su primer álbum. La canción terminó formando parte de Diecinueve, su disco debut lanzado en 2020, compuesto íntegramente por 12 temas propios.
"Mi papá siempre me dijo que yo haga lo que sienta, lo que quería y me hiciera feliz", reveló en una entrevista reciente. De hecho, antes de elegir la música como camino, su sueño era ser futbolista profesional. “Era mi sueño, pero cuando me di cuenta que no podía, que jugaba con varones y veía que no había fútbol femenino, entonces sí me encontré con la música”, explicó. Y esa transición fue más que natural: en su hogar, el arte y la expresión siempre estuvieron a flor de piel.
En 2024, Manu redobló la apuesta y presentó Día de verano, su segundo disco, con un sonido más pulido, una narrativa más madura y una impronta que dialoga tanto con el indie local como con el folk internacional. Su carrera la ha llevado a girar por distintos puntos del país, y no es raro verla compartir escenario con su padre en momentos especiales. Ha participado en shows de Ciro y Los Persas interpretando canciones como “Vas a bailar”, “Dice” o “Me gusta”, haciendo los coros o acompañando con su guitarra.
La relación con su padre, más allá del vínculo familiar, se ha transformado también en un lazo musical. Ciro no oculta su orgullo: “Pensé que quizás me decía que no, que iba a arrugar, pero por suerte no”, dijo sobre la primera vez que ella le pidió subir al escenario. Y desde entonces, una frase suya la acompaña como mantra en cada show: "Tranquila y disfrutá".
Manu también aportó compositivamente a la banda de su padre. Es coautora y compositora de “Luz”, una de las canciones más reconocidas de Ciro y Los Persas. A pesar de que algunos podrían pensar que ser “la hija de” le allanó el camino, lo cierto es que su presencia escénica, su talento como compositora y su estilo auténtico le han valido un lugar propio en la escena.