La Ciudad de Buenos Aires vivió un momento histórico con la visita de la gimnasta estadounidense Simone Biles, considerada la mejor gimnasta de todos los tiempos. La atleta fue recibida por el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, en la sede de Parque Patricios, donde se llevó a cabo la charla motivacional “El poder de creer”.

Durante el encuentro, Macri le entregó el diploma de “Huésped de honor” y subrayó su ejemplo de esfuerzo y superación. “Es un orgullo que nos visite y que disfrute Buenos Aires. Simone es una inspiración para todos los que creemos en el deporte como herramienta de transformación”, expresó.

La llegada de Biles se enmarca en el contexto de la designación de Buenos Aires como Capital Mundial del Deporte 2027, un reconocimiento internacional por su impulso a la actividad física y el desarrollo deportivo.

Mañana, la gimnasta dictará una clínica de gimnasia artística en el Estadio Mary Terán de Weiss, en el Parque Roca, junto a su entrenador Laurent Landi, organizada por la Ciudad y la Confederación Argentina de Gimnasia.

Con 28 años, Biles acumula 11 medallas olímpicas y 23 títulos mundiales, además de ser una ferviente defensora del cuidado de la salud mental en el alto rendimiento. Ha desarrollado cinco movimientos que llevan su nombre y revolucionó la gimnasia moderna, inspirando a millones de jóvenes en todo el mundo.

“Simone no sólo es una deportista extraordinaria, es un símbolo de superación, compromiso y perseverancia”, señaló el secretario de Deportes, Fabián “Chino” Turnes, al destacar la importancia de su visita.