El senador nacional Sergio Uñac comenzó a desplegar una estrategia para reinstalarse en la escena nacional del peronismo y construir volumen político con vistas al proceso electoral de 2027. Su objetivo es claro: posicionarse como una opción presidencial surgida del interior, en un momento donde el PJ atraviesa fragmentación y carencia de liderazgos unificadores.
Con ese propósito, Uñac viajó a Neuquén para reunirse con el gobernador Rolando Figueroa, un dirigente opositor con perfil dialoguista frente al Gobierno de Javier Milei. El encuentro incluyó intercambios sobre economía, gestión y políticas productivas, especialmente vinculadas a la minería, una de las áreas que Uñac considera claves para proyectar su visión federal. “Es un gusto generar espacios para el intercambio de ideas”, sostuvo el senador en sus redes sociales.
La visita forma parte de una hoja de ruta más amplia. Uñac, referente de la agrupación Primero la Patria, espacio que reúne sectores del kirchnerismo y del peronismo del interior, plantea recorrer el país, tender puentes con mandatarios provinciales y tomar contacto directo con actores políticos, económicos y sindicales. En su entorno hablan de “una nueva tonada” para el PJ, en línea con su planteo de que la próxima fórmula presidencial debería incluir un componente del interior.
El impulso para este relanzamiento llegó tras el triunfo de Cristian Andino en las últimas legislativas de San Juan, dirigente de confianza de Uñac y una de las pocas victorias peronistas en un escenario nacional dominado por La Libertad Avanza. Ese resultado fortaleció al sanjuanino y lo llevó a acelerar sus movimientos internos.
Entre las próximas estaciones de su recorrido se analiza una visita a La Rioja, donde gobierna Ricardo Quintela, uno de los principales opositores al Gobierno libertario. El senador planea mantener un ritmo sostenido de viajes durante 2026, año clave para que el peronismo redefina su proyecto, reconstruya liderazgos y busque “volver a enamorar” a su electorado.
En la interna peronista, Uñac aparece mencionado dentro del grupo de figuras que concentran expectativas presidenciales para 2027: Gerardo Zamora, Axel Kicillof, Sergio Massa y él mismo. Kicillof ya dio señales explícitas de aspiración, mientras que Zamora y Massa mantienen silencio estratégico. Uñac, en cambio, optó por mostrar movimiento y comenzar a acumular territorio, alianzas y visibilidad.
El propio senador reconoce que el PJ enfrenta una coyuntura difícil: gobernadores desalineados, bloques legislativos debilitados, una CGT sin articulación política clara y tensiones crecientes entre Kicillof y Cristina Kirchner, cuya detención reconfiguró la dinámica interna. En ese marco, Uñac busca ubicarse en la mesa final del peronismo, dispuesto a competir con su estilo moderado, su origen provincial y su ambición explícita.
“El sanjuanino levantó la mano”, dicen en su entorno. Y en un peronismo que ya piensa en 2027, su decisión de volver a la cancha empieza a tomar forma.