Un estudio realizado por el Instituto para el Desarrollo de Calidad en la Educación de Alemania investigó la calidad de escritura de los alumnos jóvenes. El objetivo, fue analizar las influencias de las redes sociales, y el lenguaje propio de ellas, en las nuevas generaciones.

Entre los resultados del trabajo se destaca el hecho de que el 20% de los encuestados no manejan las nociones básicas de ortografía.

El Presidente de la Asociación Alemana de Profesores, Heinz-Peter Meidinger señaló que esta realidad se debe a los cambios en los hábitos de lectura de los más jóvenes. A su vez, recalcó que el uso de las aplicaciones de chat móviles, como la popular WhatsApp, colaboran a empeorar las habilidades de escritura.

Sobre esto, Meidinger dijo: “dejan de leer libros para leer cientos de mensajes cortos en redes sociales. La ortografía no juega ningún papel en las redes sociales. Más bien se mira mal a quien se toma la molestia de escribir hasta las mayúsculas”.

En nuestro país, según las evaluaciones realizadas con el plan “Aprender 2017”, se estudió que 6 de cada 10 alumnos fallan en la puntuación de sus escritos. Por esta razón, Silvia Ramires Gelbes, doctora de Lingüística y profesora de la Universidad de San Andrés expresó: “Los errores existieron siempre. Algunas formas son aptas para el WhatsApp se aplican en otros contextos para los que no lo son”.

Aun así, vale destacar que muchos especialistas en la materia afirman que no las redes sociales no son una amenaza, sino todo lo contrario. Esta corriente asegura que son herramientas que facilitan el ejercicio de la lectura, y la escritura, con más frecuencia en las nuevas generaciones.

En contraposición con el titular de la asociación alemana, existe una corriente que afirma que las redes sociales no son una amenaza, sino todo lo contrario, constituyen una “oportunidad para leer y escribir con más frecuencia”.

El hecho no reside únicamente en la cantidad de textos leídos o redactados, sino que la falencia del sistema educativo nace en promover una lectura crítica. Saber y conocer que se está queriendo decir y cómo.