Especialistas calculan que hasta 2020 había ganado ocho millones de dólares.

Es considerado uno de los artistas más influyentes a nivel mundial y se encargó de llevar la bandera de la música latina a lo más alto. Las reproducciones las cuenta de a millones, las vistas en Youtube pasan siempre las ocho cifras y sus shows se apilan en sold outs. Entonces, ¿cuánta plata factura Bad Bunny? El artista dice que no sabe.

Según calculan algunos que saben de la industria de la música, hasta 2020 el conejito malo habría facturado la friolera de ocho millones de dólares. Es que publicó tres discos y vendió cerca de 16 millones de copias. Además de lo artístico, se convirtió en un ícono del mundo de la moda y colaboró con marcas de ropa y de zapatillas (entre las que se destaca un jugoso contrato con la marca de las tres tiras para lanzar las zapatillas más caras del mercado).

“Bueno, hice este álbum y ni siquiera he preguntado cuánto estoy obteniendo. Así es como trabajo. No estoy al tanto de los números ni de la cantidad de dinero que obtengo. Hice este disco porque quería hacerlo y porque me llenaba”, comentó Benito Martínez en una entrevista que dio a la revista Billboard.

Así, Bad Bunny dejó en claro que no piensa en las ganancias económicas cuando se trata de su arte, porque simplemente quiere hacer lo que lo representa y lo que es mejor para sus fans.

Si hiciera falta tener una noción, las redes sociales son un buen parámetro para sus fuentes de ingresos. Su canal YouTube cuenta con 28 millones de suscriptores, y podría estar embolsándose alrededor de 80 mil dólares al año por sus canciones. Su tema “Soy Peor” le reportaría unas ganancias de 12.000 dólares anuales.

En cuanto a los patrocinios en Instagram, según publicó la prensa especializada podría cobrar entre 30 y 60 mil euros por cada foto de contenido comercial para que llegue a sus 34 millones de seguidores.

En el principio de su carrera Bad Bunny cobraba alrededor de 30 mil dólares por show. Ahora, ese número podría haber crecido fuertemente dado que es uno de los artistas que se posicionaron como referentes de la cultura pop actual. Eso tiene su clara consecuencia en las cuentas bancarias.

Giras, discos, reproducciones, convenios con marcas de moda, auspicios en sus redes sociales, regalías, trabajo como productor. El conejo malo es una máquina de facturar y ni él sabe cuánto es. Lo cierto es que se ganó lo que tiene a fuerza de talento.