Sinéad Burke es escritora y locutora, aunque ella se autodefine como educadora y defensora. La irlandesa de 1.05 metros de estatura logró repercusión a partir de su charla TED: "Por qué el diseño debe incluir a todo el mundo". Desde ese momento, Sinéad se convirtió en una influencer de la industria de la moda.
La joven de 29 años compartió la tapa de The Business of Fashion junto a Kim Kardashian. Asimismo, el año pasado fue seleccionada como una de las 100 mujeres de la BBC.
Su influencia en el mundo de la moda es tal que fue la primera persona con enanismo en caminar la alfombra de la gala del Met. Además, colaboró con Open Style Lab, una organización que trabaja diseñando ropa para discapacitados sin comprometer el estilo o la comodidad.
A su vez, la influencer no pasó desapercibida en la Semana de la Moda de Londres. Burke fue una de las invitadas especiales en la primera fila de importantes desfiles como el de Victoria Beckham y Roksanda. Hasta fue ubicada a tan solo unos asientos de Anna Wintour, la líder fashionista.
Para estos eventos especiales, llevó un conjunto firmado por la ex Spice Girls compuesto por una camisa traslúcida amarilla combinada con una flor negra y una falda marrón recta con una cadena dorada. En los pies usó zapatos negros con un poco de altura. Cuando desde AFP le consultaron qué marcas formaban parte de su vestidor ella respondió: "Hay algunos Gucci, algunos Prada, algunos Dior, Balenciaga, Victoria Beckham, Christopher Kane, Burberry".
En la Fashion Week de la capital británica del 2018 durante un desfile de Burberry, Sinéad tiró de la manga de la camisa del editor en jefe del Vogue inglés Edward Enniful. La activista se presentó formalmente y comenzó una conversación que terminó con ella en la tapa de la edición de septiembre del 2019 de la prestigiosa revista. Elegida por la mismísima Meghan Markle, Burke se convirtió en la primera persona pequeña en aparecer en la tapa de Vogue como una de las "15 fuerzas para el cambio femeninas".
"Yo crecí obsesionada con la moda porque le decía al mundo quien era en una forma que yo no podía. Sin embargo, desde cada punto de vista estaba excluida", explicó en un video de la revista y agregó: "Pero ahora acá estoy, una persona pequeña en la tapa del British Vogue. Si eso no quiere decir cambio, no sé qué significa".
La locutora busca un cambio en el sistema a largo plazo para que "una joven de 18 años que está en la universidad, que estudia marketing, que sea una persona pequeña como yo, pueda entender que puede trabajar para Victoria Beckham o para Gucci", dijo.
"El cambio tiene que suceder al más alto nivel con el director ejecutivo y los directores creativos, pero también con la nueva generación de diseñadores", le comentó Burke a AFP. Aunque cree que aún queda un largo camino para recorrer para lograr su objetivo final: "transformar la industria más exclusiva del mundo". "¡Pensé que sería maestra para siempre y aquí estamos, en la Semana de la Moda de Londres!", dijo con emoción.