A poco de comenzar el gobierno del Frente de Todos nos tocó atravesar dos pandemias. Una de ellas, la sanitaria, tiene en vilo al mundo entero en donde ya causó millones de muertes. La otra, la económica, es el resultado de cuatro años de políticas de Cambiemos que empeoraron la vida de argentinos y argentinas. Pese a todo y de a poco nos vamos poniendo de pie, tal como lo hicimos alguna vez junto a Néstor y Cristina. El esfuerzo hecho hasta ahora fue mucho y el tramo que nos toca recorrer en los próximos meses no va a ser fácil pero es posible si lo hacemos con unidad.

Cuando el Covid-19 entró en Argentina amenazaba con reforzar las desigualdades preexistentes: las sociales, las económicas, las de género. Para evitarlo, el rol del Estado fue fundamental. Estuvo presente para todos los argentinos y las argentinas, al fortalecer el sistema de salud que había sido tremendamente descuidado por el gobierno anterior: construimos 12 hospitales modulares, hay en proceso 18 nuevos Centros Sanitarios en diez provincias para la temporada de verano, además de que está en marcha la Red Sanitaria Federal Covid-19. Son 60 obras en 53 ciudades para cuidarnos.

Estuvimos presentes para los empresarios y los trabajadores con la Asistencia al Trabajo y la Producción, que se extendió hasta fin de año. El objetivo fue que ninguna fábrica ni empresa tenga que cerrar las persianas para así no perder capacidad productiva por culpa de la pandemia. Se completó en octubre el pago de casi 10 millones de salarios complementarios y se continúa con la doble indemnización para evitar despidos. También estuvimos ahí para no desproteger a quienes trabajan en la economía informal. Así fue pensado el Ingreso Familiar de Emergencia.

Estamos para las mujeres: en julio se presentó el Plan Nacional de Acción contra las Violencias por motivos de género, conformado por más de cien compromisos de organismos del Gobierno nacional orientadas a erradicar todas y cada una de las violencias que amenazan a las mujeres: las físicas, las psicológicas, las simbólicas, las económicas.

También, con esa misma perspectiva de género, avanzamos en el Cupo Laboral Travesti Trans, que no solamente está en un decreto presidencial sino que además estamos a punto de tratar una ley en el Congreso nacional para empezar a reparar las múltiples vulneraciones de derechos que sufrió y sufre este colectivo.

Estamos pensando en el futuro y, para eso, logramos aprobar en el Congreso un Presupuesto para 2021 que convierte todo eso que no tenemos que pagar de intereses de la deuda producto de la negociación con los acreedores, en inversión pública: obras e infraestructura, educación y conectividad, salud pública, innovación y desarrollo.

Como prometimos, empezamos por los últimos para llegar a todos y a todas. Ni bien asumió Alberto Fernández puso en marcha el Plan Argentina contra el Hambre y la Tarjeta Alimentar. Este mes anunciamos la inclusión de un millón de niñas, niños y adolescentes más a la Asignación Universal por Hijo. Tal como prometimos en campaña, ahora hay 170 medicamentos esenciales gratuitos para 5 millones de jubilados de PAMI. Además, y por la pandemia, ANSES suspendió el trámite de Fe de vida hasta fin de año.

Estamos presentes para empezar a crecer. Lanzamos el Plan Procrear 2020, con 300 mil soluciones habitacionales, entre créditos personales e hipotecarios para generar vivienda y trabajo. En septiembre se puso en marcha un plan de obras que va a generar 20 mil nuevos empleos con paridad de género.

El Estado también cuidó la economía de los hogares: se establecieron Precios Cuidados, se suspendieron los aumentos de tarifas de servicios públicos; decretamos a la televisión por cable y a la telefonía como "servicios públicos y esenciales". Además, congelamos las tarifas hasta fin de año.

Cuidamos a los artistas invirtiendo mil millones de pesos destinados a atender la emergencia. “Fortalecer Cultura”, por ejemplo, otorga un apoyo económico para trabajadoras y trabajadores de la cultura de tres cuotas de hasta 15 mil pesos.

En medio de una pandemia, reconfirmamos la importancia de invertir en ciencia. Por un lado, científicos y científicas de Conicet desarrollaron un test para el Covid. Por otro, investigadores e investigadoras lograron una tela antiviral para barbijos.

Con el esfuerzo que hacemos entre todas y todos, empieza a asomar la Argentina del futuro. Desde el 17 de octubre, como si fuera un giro poético de la historia, pareciera que empezó a salir el sol: los bocinazos compañeros de aquel día, el triunfo del MAS en Bolivia y el regreso a su patria de Evo Morales, la cercanía de la vacuna y la estabilización de los casos nos dan esperanza. Los números acompañan: según INDEC, la industria está retornando a niveles prepandemia (creció 4,3% en septiembre de 2020 respecto de agosto y 3,4% interanual) y el sector de la construcción creció 3,9% mensual en septiembre respecto del mes anterior. De la mano del sector privado queremos generar trabajo y consumo para encender la economía, producir para crecer.

Llegamos al gobierno tras haber conseguido formar una coalición. Eso no significa pensar igual en todo sino coincidir en las cuestiones más básicas. La pandemia, a su vez, nos exigió trabajar coordinados, con las prioridades claras y un Estado presente. Fue la unidad la que nos condujo a la victoria y va a ser la unidad la que nos hará crecer.

(*) Diputada Nacional del Frente de Todos y Secretaria Parlamentaria del bloque